Soneto: No tengo por costumbre

No tengo por costumbre 

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No tengo por costumbre rezar mirando al cielo,

ni soy de los que creen que sirva para nada;

a cada nuevo día la noche es mas cerrada 

y a cada nueva pena más grande el desconsuelo.

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No tengo por costumbre guardar en un pañuelo 

las lágrimas que afloran por una suerte echada,

todo sigue su curso jornada tras jornada, 

nada cambia las cosas , solo cambia el anhelo.

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Sufre mi corazón por un amargo trago,

incluso cuando estoy besando tus despojos 

y te ofrezco en silencio mi vida como pago.

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O al menos el deseo de perder los enojos 

que se clavan en mí, cuando me siento aciago,

por un amor que muere delante de mis ojos.

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Fotografía y poema : Ramón Bonachí.