Soneto Alejandrino: Hijos de la agonía

Hijos de la agonía
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Hay niños que se lavan la cara con arena
y se comen las lagrimas, mezcladas con limón,
hay niños con espinas dentro del corazón
que intentan ser felices con risas que dan pena.
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Hijos tuyos y míos, viviendo en casa ajena,
entre cuatro paredes de plena confusión,
hijos que sin quererlo, son carne de cañón,
lejos de todo el lujo que mira y los condena.
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Con los zapatos rotos afrontan su destino,
llevando todo el peso del vivir día a día,
con el hambre añadiendo, piedras en el camino.
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Hay niños infelices, hijos de la agonía ,
con la voz apagada, lejos de todo trino;
son hijos de algún dios con el alma vacía.
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Poema Ramón Bonachí.
Nota: El dios al que me refiero es al que mueve los hilos de la guerra.