El sol nace, detrás de las montañas,
con el, formamos parte de la tierra,
rezamos por las almas de los nuestros
en las noches de clara luna llena.
Allí mi gente vive con sus ritos
nadie les manda, todo se respeta,
adoran a sus dioses cada día
y duermen todos bajo las estrellas.
Las colinas, los ríos y los montes
nacieron en su día sin fronteras,
lo dicen los espíritus de antaño
la esencia de ellos, corre por mis venas.
Mas eso al hombre blanco le incomoda
pretende someternos a la fuerza,
esta tierra no es de ellos ni de nadie
no queremos vivir en sus reservas.
En ellas perderemos las costumbres
seremos una mancha en el planeta,
salvajes con las plumas oxidadas,
inútiles, bebiendo en las bodegas.
Padre,que el dios del trueno grite fuerte
y derrote al intruso que se acerca,
no quiero ser un pájaro encerrado
quiero ser un salvaje mientras pueda.
Ramón Bonachí
Saludos Ramón, un bello homenaje A Gerónimo historia y leyenda de un guerrero.
ResponderEliminarUn cálido saludo
Me encanta este poema que es testimonio d e la historia
ResponderEliminarde la valorización a nuestros ancestros
los primeros padres de América , que nunca morirán
que su historia y legado está más vivo que nunca...
bien por este homenaje de vida...
Magistral! Un gran homenaje a los dueños legítimos de las Tierras. Le felicito poeta, saludos.
ResponderEliminarMagistral! Un gran homenaje a los dueños legítimos de las Tierras. Le felicito poeta, saludos.
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