Soneto a una pintura
Mastodonte
.
A los ojos me llega de perfil,
y al devenir de espuma y sal me ofrezco
me atrapa su color, desaparezco
entre un ego feroz, loco y febril.
.
En medio de esa imagen tan viril,
Inmóvil y en silencio permanezco ,
se eleva a gran altura, me estremezco,
pues la lengua parece ser hostil.
.
Grita la voz en su verdoso vientre
que cerca esta de ser irrelevante,
como cualquier final atronador.
.
Cuando a pies de su altar, solo se encuentre,
eterna ha de quedar su lengua errante
en manos de un instante soñador.
.
Poema: Ramón Bonachí.
Pintura: Okusai (Katsushika Kanagawa)
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